Iluminación LED

 

En la actualidad pudimos acondicionar e incorporar leds en un 90% de todos los dispositivos de iluminación.

 

Gracias a su reducido tamaño, capacidad para generar luz y la variedad de colores que podemos generar los leds son cada vez más usados. Además, con respecto a la iluminación tradicional de lámparas incandescentes o fluorescentes los leds tienen ventajas que los hacen muy interesantes como sustitutos de la iluminación.

 

 

Los LED´s consumen entre el 80-90% menos de lectricidad. Esto supone un importante ahorro de energía.

 

La vida media de una lámpara LED se sitúa entorno a las 45.000 horas frente a las 2000 horas que una bombilla estándar ofrece. El dato salta a simple vista, con una lámpara LED tendríamos cinco años de luz continuada, 24 horas al día y 7 días a la semana; frente a los 83 días de la bombilla estándar.

 

Las bombillas normales contienen tungsteno y los fluorescentes mercurio, productos tóxicos. Los LED son reciclables y cumplen con la normativa europea RoHS de sustancias contaminantes.

 

Al contrario de las bombillas tradicionales no desprenden calor lo que evita el desperdicio de energía y permite su uso en lugares pequeños y delicados donde ese calor producido puede ser perjudicial.

 

La larga vida de los productos LED evitan tener que estar realizando un mantenimiento frecuente.